DEBEMOS PERDONAR

DEBEMOS PERDONAR.

Cuando se trata de perdonar a las personas que nos han lastimado, lo pensamos muy bien antes de hacerlo, y en ocasiones, llegamos a pensar que no son merecedores de recibir nuestro perdón, así es que no les perdonamos. Al tomar esta posición para nada adecuada como seguidores de Cristo, pasamos por alto el perdón que hemos recibido de nuestro Señor, ya que Él nos perdonó sin que lo merezcamos, pues nuestras ofensas eran más graves que las ofensas que nos pueden hacer las personas que están a nuestro alrededor. Dios no se detuvo a pensar para extendernos Su perdón, sino que simplemente lo hizo. El Señor por su profundo amor nos buscó para perdonar todas las ofensas que habíamos cometido contra Él, por eso, de la misma forma que fuimos perdonados sin ser merecedores de ello, nosotros lo debemos hacer con los que nos lastiman, ya que es una muestra de lo profundamente agradecidos que estamos por a ver sido perdonados y liberados de toda condenación. Colosenses 3:13.