ÚNICO DIOS VERDADERO

ÚNICO DIOS VERDADERO

SALMOS 135:5 Yo conozco la grandeza del SEÑOR: nuestro Señor es más grande que cualquier otro dios. 15 Los ídolos de las naciones no son más que objetos de plata y oro, manos humanas les dieron forma. 16 Tienen boca pero no pueden hablar, tienen ojos pero no pueden ver. 17 Tienen oídos pero no pueden oír, tienen nariz pero no pueden oler. 18 Y los que hacen ídolos son iguales a ellos, como también todos los que confían en ellos. NTV.

Las primeras civilizaciones del mundo antiguo, tenían nociones de la existencia de un ser superior, un ser divino con capacidades sobrenaturales para realizar milagros y grandes proezas en beneficio de los pueblos. Cada una de las naciones existentes adoptaron sus propios dioses para venerarlos. Pero como no querían rendir adoración a algo invisible, por lo cual dieron forma a sus dioses. Esta adoración a dioses hechas por manos humanas, trascendió a lo largo de la historia humana, por eso en el presente, se mantiene la adoración a imágenes e ídolos por ciertos grupos religiosos en diferentes países y pueblos del mundo.

Los reinos y pueblos en el período del Antiguo Testamento, tenían adoración a diversidad de dioses. Estos dioses generalmente eran representados por imágenes e ídolos hechas por manos humanas, pero ninguno de esos dioses se comparaba en poder y majestad al Dios del pueblo hebreo. Al Dios que no era representado por ninguna figura tallada por manos humanas. En presencia de la nueva generación del pueblo hebreo, el salmista afirma la grandeza del único Dios verdadero, el Dios que está por encima de los dioses de los pueblos paganos. En el pasado, en el presente, ni aun en el futuro, existirá un dios que se asemeje en poder y majestad al único Dios verdadero. Jamás existirá un dios que esté por encima de los gobernadores terrenales, potestades espirituales, y sobre todos los ídolos hechos por manos humanas. Yahveh el único Dios verdadero está por encima de todo lo existente en este mundo, tanto físico como espiritual.

El salmista recalca que los dioses que adoran las naciones paganas, no son más que objetos de plata y oro. Objetos que tienen boca, pero no pueden hablar, tienen ojos, pero no pueden ver. Tienen oídos, pero no pueden oír, tienen nariz, pero no pueden oler. Los ídolos que adoran ciertos grupos religiosos, son perecederos porque son hechos por manos de hombres y, por consiguiente, los ídolos son inferiores a los hombres. Son mudos, ciegos, sordos e inanimados. Además, el salmista afirma que los que los hacen y confían en ellos son tan impotentes y llegan a ser como ellos ;nada, es decir: son espiritualmente ciegos, sorgos, mudos y muertos.

Los ídolos nada son y no les pueden dar ninguna bendición a quienes los sirven, la adoración a ellos es inútil, una verdadera pérdida de tiempo. Por otra parte, el único Dios verdadero está siempre activo tanto en la naturaleza como en la historia de la humanidad. Como Creador y Preservador, él gobierna el mundo para el bien de su pueblo. Asimismo, dirige el curso de la historia para el bien de su pueblo. Por eso, solo Él merece toda la adoración, la gloria y la alabanza por toda la eternidad.

Queridos amigos, ningún objeto de oro, plata, bronce o algún otro material hecho por manos humanas podrán asemejarse al único Dios verdadero. Porque esos objetos no tienen ningún poder ni ejercen autoridad sobre los gobernadores terrenales, y menos aún sobre las potestades espirituales. Solo el único Dios verdadero tiene autoridad sobre todas las cosas físicas y espirituales existentes en este universo, porque Él es creador de todo y a Él se rinde toda su creación. Amigo, ya no siga adorando a dioses que nada pueden hacer por usted. Renuncie hoy mismo a las imágenes e ídolos hechos por manos humanas, acérquese al único Dios verdadero, al único Dios creador de todo el universo. El Dios que le puede rescatar de la condenación y darle una nueva vida. Acepte a Jesucristo como su Señor y Salvador. Él es el único Dios que merece toda la gloria, la honra y la alabanza por toda la eternidad.