EL SEÑOR MANTIENE CON VIDA A SUS HIJOS
EL SEÑOR MANTIENE CON VIDA A SUS HIJOS
SALMOS 54:1 ¡Ven con tu gran poder, oh Dios, y rescátame! Defiéndeme con tu poder. 2 Escucha mi oración, oh Dios; presta atención a mi ruego. 3 Pues me atacan desconocidos; gente violenta trata de matarme. No les importa Dios en lo más mínimo. 4 Pero Dios es mi ayudador; ¡el Señor me mantiene con vida! 6 Sacrificaré una ofrenda voluntaria a ti; alabaré tu nombre, porque es bueno, oh SEÑOR 7 Pues me libraste de mis dificultades y me ayudaste a triunfar sobre mis enemigos. NTV.
Cuando los problemas y las enfermedades llegan a la vida de las personas que han entregado sus vidas a Cristo Jesús, rápidamente se afligen, y pierden todas las perspectivas del cuidado y la protección de Dios. Los cristianos pese a su confianza en Cristo, son rápidos para olvidarse que todas las cosas que ocurren en el mundo, están bajo Su control y autoridad. Se olvidan que pese a los problemas y enfermedades que puedan estar enfrentando, se mantienen con vida y a salvos, gracias al cuidado y la protección del Eterno Creador.
David en medio de sus aflicciones, confiaba en el poder de su Creador para resguardarlo y protegerlo, por eso, siempre que se encontraba en medio del peligro se mantenía en oración. David, siempre clamaba a Dios para que le resguardara de los planes maléficos de sus enemigos. Algunos enemigos de David, sabían que él era el ungido de Dios, pero eso no les detenía para que siguieran adelante con sus planes de eliminarlo. Los enemigos de David no tenían temor de Dios. Al dar una mirada a la historia del cristianismo, podemos encontrar un patrón similar, muchos cristianos murieron en manos de hombres perversos que no tenían miedo de asesinar a los escogidos de Dios.
La mayoría de los cristianos, no pueden ver la mano de Dios en medio de los problemas y las enfermedades, pero David el ungido de Dios, al encontrarse en medio de las persecuciones, siempre veía el favor del eterno Creador. Por eso en su oración exclamó: _¡Dios es mi ayudador!; ¡el Señor me mantiene con vida_! El salmista, veía que los planes maléficos de sus enemigos, no le habían alcanzado, ni le habían lastimado, y peor aún, herido de muerte, solo gracias a la ayuda, el cuidado y la protección de Dios. El eterno Creador, despliega su gran poder para cuidar y proteger a todos sus hijos, pero esto no implica que sus hijos estarán libres de padecer tribulaciones. Los problemas y las enfermedades podrán llegar a la vida de los hijos de Dios, podrán causar molestias, dolores y aflicciones, pero de ahí no pasarán , porque el eterno Creador, no permitirá que sus hijos padezcan más de lo que puedan resistir.
David al reconocer que el eterno Creador le había guardado con vida pese a todos los peligros que le asechaban. Con un corazón agradecido, voluntariamente ofreció presentar sacrificios, y ofrendas al eterno Creador en su santuario. Además, prometió alabar y exaltar su nombre, por su bondad y su benevolencia. La gratitud al Señor, no debe ser solo cuando el cristiano lleva una vida tranquila libre de todo problema, necesidades o enfermedades, la gratitud al Señor debe ser siempre, pese a las dificultades que pueda atravesar. Dios merece que su nombre sea alabado y exaltado por siempre y para siempre, por todas las cosas que hace por sus hijos.
Queridos hermanos, David, pese a las aflicciones que estuvo atravesando, fue agradecido con Dios, porque Él, no permitió a sus enemigos que le causaran daño y le mantuvo con vida. David en gratitud prometió presentarle sacrificios y ofrendas en su santuario, además alabar y glorificar su Santo nombre. Hermanos, pese a las aflicciones que podamos tener, no perdamos nuestra fe en el Señor, mantengámonos firmes y estemos siempre agradecidos por guardarnos con vida. Al igual que el salmista, rindamos nuestras vidas al Señor, a través de nuestras alabanzas en honor a Su bendito Nombre.