TAREA ENCOMENDADA

TAREA ENCOMENDADA.

2 CRÓNICAS 8:14 Para asignar las responsabilidades a los sacerdotes, Salomón siguió el reglamento de su padre David. También designó a los levitas para dirigir al pueblo en alabanza y para ayudar a los sacerdotes en sus tareas diarias. Designó porteros para cada puerta según sus divisiones, siguiendo las órdenes de David, hombre de Dios. 15 Salomón no se desvió en absoluto de las órdenes de David respecto a los sacerdotes, los levitas y los tesoros. NTV.

En la mayoría de las ocasiones, cuando existe un intercambio de liderazgo en los países, instituciones u organizaciones de carácter públicas o privadas. Cada gobernante, líder o administrador, lleva sus propios planes para aplicar durante su gestión administrativa, y desechan los planes de sus predecesores. Salomón durante su gobierno, decidió aplicar el reglamento que su padre David había suscrito durante su reinado en cuanto a la asignación de los servidores en el templo de Jerusalén.

El establecimiento de los planes para el culto señaló la finalización del proyecto del templo. El monarca hebreo para establecer el culto al eterno Creador en el templo recién construido, siguió las instrucciones de su padre, designó a los clanes de Leví, en las diferentes labores dentro del templo. Salomón designó a los levitas para dirigir al pueblo en alabanza, y para que ayuden a los sacerdotes en sus tareas diarias. Designó porteros para cada puerta según sus divisiones. Todo el trabajo en cuanto al proyecto del templo de Jerusalén había sido planificado por David desde la colocación de los cimientos hasta el establecimiento del culto. La autoridad divina para la construcción y el plan del culto, con las tareas especiales asignadas a los levitas, dependía de que así lo había mandado David, varón de Dios.

En el tiempo de Salomón, la adoración en el templo de Jerusalén, se realizó apropiadamente conforme al mandamiento de Moisés, y conforme a los reglamentos establecidos por David, su padre. Las celebraciones se realizaron en el momento apropiado, en los días señalados y por las personas apropiadas, sacerdotes en sus oficios, y los levitas para que alabaran y ministraran delante de los sacerdotes. Salomón no pasó por alto ninguna de las estipulaciones de su padre David. Los porteros fueron nombrados y asignados en turnos a sus diversos puestos. Hasta el asunto de los tesoros del Templo recibió la cuidadosa atención de Salomón. El plan de David para la adoración en la casa de Dios se llevó a cabo fielmente en todos los detalles.

De esta forma Salomón cumplió su misión en la vida, una misión que Dios le había dado hacía mucho tiempo por medio de su padre David. El eterno Creador eligió a Salomón para que construyera su templo, el lugar de su morada en medio del pueblo. Además, le había prometido a través de su padre, que Él estaría con él, que no le dejaría ni le desampararía, hasta que acabara todo el proyecto del templo. Dios había cumplido su palabra a David, a Salomón y a su pueblo. La casa de adoración fue acabada totalmente bajo el cuidado y la protección del eterno Creador.

Queridos hermanos, algunas veces parece increíble pensar que Dios les pueda dar una tarea importante y un mensaje tan precioso a pecadores pobres y frágiles, sin embargo, lo hace. Dios dio una tarea especifica a Salomón, construir el templo e instaurar el servicio de adoración. Salomón para culminar con éxito su tarea, siguió fielmente a los reglamentos de su padre hasta el final, sin desviarse. Hermanos, al igual que a Salomón, nuestro Señor Jesucristo, nos delegó una tarea importante. Él nos delegó la tarea de compartir su palabra con todas las personas del mundo. Al igual el Señor nos prometió permanecer con nosotros en el cumplimiento de la tarea, todos los días hasta el fin del mundo. Al igual que Salomón, cumplamos la tarea encomendada sin desviarnos a la derecha ni a la izquierda de la bendita palabra de nuestro amado Creador.