ANUNCIEMOS EL EVANGELIO
ANUNCIEMOS EL EVANGELIO
Por naturaleza, las personas no pueden permanecer en silencio cuando se encuentran reunidas, siempre tienen algo que compartir o comentar con otros. Comparten los logros que han tenido, las últimas noticias que se están dando en el país, los comentarios que han escuchado acerca de la vida de otras personas, e inclusive comparten la película, la serie o la novela que están viendo. En esto de compartir con otros, también se encuentran involucrados los hijos de Dios. Al igual que el resto de las personas, los creyentes permanentemente están compartiendo las banalidades de este mundo, pero cuando se trata de compartir algo que es realmente importante para esta vida y la vida después de la muerte no lo hacen, se quedan callados. Cuando los creyentes se reúnen con otros creyentes pueden comentar de todo lo que se suscita en el mundo, pero menos de la prédica del domingo, la lectura Bíblica que están llevando a cabo, o los devocionales que han estado escuchando. Si entre creyentes no comentan nada de la vida eterna, menos lo hacen cuando están en medio de las personas inconversas.
En contraste con la mayoría de seguidores de Cristo de la actualidad, los seguidores de Cristo de la iglesia primitiva, no perdían el tiempo comentando las banalidades de este mundo, sino que compartían la acción salvífica que Jesucristo había hecho por toda la humanidad. Estos comentarios no solo lo hacían cuando se reunían entre creyentes, sino que también lo hacían en medio de las personas inconversas, pues el anhelo de los miembros de la iglesia primitiva era que el evangelio llegara a todas las personas del mundo, para que ellos también tengan comunión con Dios Padre y con su Hijo Cristo Jesús como ellos lo tenían. Estas acciones de los fieles seguidores de Cristo, nos da a conocer el apóstol Juan en su primera epístola: “Les anunciamos lo que nosotros mismos hemos visto y oído, para que ustedes tengan comunión con nosotros; y nuestra comunión es con el Padre y con su Hijo, Jesucristo.” 1 Juan 1:3 NTV.
Como testigos del ministerio de Jesús, los discípulos y toda la iglesia primitiva estaban en condiciones para enseñar la verdad acerca del evangelio que da salvación a todas las personas que no habían tenido el privilegio de ver ni de oír a Jesucristo. Nosotros tampoco hemos visto, ni oído a Jesucristo, pero podemos tener la certeza de que las palabras de los siervos de Cristo que nos precedieron son fidedignas, y con esa certeza, nosotros también debemos anunciar a las nuevas generaciones esta noticia maravillosa para que ellos también alcancen la comunión con el Padre, con el Hijo y con el Espíritu Santo. No nos quedemos callados, al igual que compartimos las banalidades de este mundo, debemos compartir con más razón la verdad del evangelio a todo el mundo.
… [Trackback]
[…] Info to that Topic: jesusislife.net/2023/12/04/anunciemos-el-evangelio/ […]
… [Trackback]
[…] Read More on on that Topic: jesusislife.net/2023/12/04/anunciemos-el-evangelio/ […]